El comparativo de superioridad se construye con el adverbio MÁS + adjetivo, adverbio o sustantivo + QUE.
Tú eres más divertida que Sandra.
El comparativo de inferioridad se construye con el adverbio MENOS + adjetivo, adverbio, sustantivo + QUE.
Yo tengo menos seguidores en Instagram que Emilio.
¡IMPORTANTE! Como en otros idiomas existen irregularidades:
No es correcto decir “más bueno” sino MEJOR. Mi casa es mejor que tu casa.
No es correcto decir “más malo” sino PEOR. Esta comida es peor que la comida de mi madre.
No es correcto decir, cuando hablamos de la edad, “más grande” sino MAYOR. Mi hermano es mayor que yo.
No es correcto decir “más pequeño-a” sino MENOR. Soy menor que mi hermano.
El comparativo de igualdad se construye con TAN + adjetivo, adverbio + COMO o con IGUAL DE + adjetivo, adverbio + QUE.
Conduces tan rápido como Fernando Alonso.
Marta es igual de inteligente que su madre.
Cuando usamos el comparativo de igualdad con sustantivo TAN concuerda en género y número. TANTO-A, TANTOS-AS + sustantivo + COMO.
En el zoo hay tantos osos como tigres.
Clasificamos el grado superlativo en relativos y absolutos.
Los superlativos relativos se construyen con EL,LA,LOS,LAS + MÁS/MENOS + ADJETIVO.
El más inteligente de la clase es Jesús.
Quito es la ciudad más bonita del mundo.
Los hijos de mi prima son los menos divertidos.
Los superlativos absolutos se construyen con Adjetivo + ísimo-a, ísimos-as y los usamos para destacar que algo o alguien tiene un nivel muy alto de cierta cualidad.
Sofía Vergara es guapísima. (Es muy guapa, es super guapa)
Esta película es buenísima.
Y, como siempre, ¡existen irregularidades!
Aquí tienes algunos ejemplos:
Amable >> amabilísimo-a
Antiguo-a >> antiquísimo-a
Fuerte >> fortísimo-a / fuertísimo-a
Joven >> jovencísimo-a
Lejos >> lejísimos
Largo-a >> larguísimo-a
Pobre >> paupérrimo-a
Rico-a >> riquísimo-a
Malo-a >> malísimo-a / pésimo-a
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